viernes, 25 de mayo de 2012

Los domadores de letras

Todo el mundo sabe en el país de Campolejos que todo niño entre 5 y 7 años tiene que aprender a domesticar letras y números.

Son domadores de lo más valientes y decididos.

 Eso lo sabía María, de 6 años, pero algunas veces se le olvidaba que procedía de una familia de grandes domadores de letras, y algunas mañanas sentía miedo por tener que enfrentarse a ellas. Miedo de las vocales y consonantes, de las palabras y oraciones que todavía no había conseguido domestricar del todo y andaban salvajes por los libros y cuadernos sin mostrar a María todos los secretos que guardaban, y a veces cuando leía la b parecia una p o una d, la a una o y hacían que María se equivocara al leerlas en voz alta y era por eso que María sentía miedo y no podía evitar que grandes lagrimones se escaparan de sus ojos y escurrieran por el tobogan de su cara hasta el papel donde las letras picaras parecían reirse de ella. Tanto miedo tenía a que las letras jugaran con ella que no quería ir a la Gran Escuela de Campolejos, donde se aprendían los mejores trucos para domesticar a las temibles letras.

Los sabios del país habían visto otras muchas veces estos sintomas. María no sabía pero tenía lo que los sabios llamaban Mieditisletrada, que tenía sintomas mil dispares. Otros muchos niños entre 5 y 7 años a lo largo de miles de años de historía de Campolejos habían padecido Mieditisletrada, a unos les salían sarpullidos por la barriga, a otros les dolía la barriga, o la cabeza o la pierna derecha o la izquierda, hubo una vez un niño de 6 años, llamado Manuel, en el año 50 del siglo pasado, al que la Mieditis letrada le provocó que le saliera el Rey de todos los granos en la punta de la nariz.

Los sabios sabían que cada caso era especial y que requería remedios diferentes.

Como uno de los sintomas de María era Pegaditismamitis, los sabios aconsejaron a la mamá de Maria que tejiera dos pulseras mágicas de Cariño, en la que su mamá puso todo el cariño que ella y su papá sentían por María, de tal forma que el contacto de esas dos pulseras mágicas en los momentos de Mieditisletrada entraran en funcionamiento y recordaran a María que procedía de una Gran Familia de domadores de letras y le dieran Seguridad a la hora de enfrentarse a tan terribles picaras.


(to be continued)...